Y siguen las recomendaciones

Saludos terrícolas. Volviendo al ruedo. Estuve de vacaciones en las cuales además de hacer muchas otras actividades (para que no se crean que soy una larva pegada a la tele, o bueno, crean lo que quieran) vi muchas (muchas muchas muchas películas). Algunas más destacables que otras, pero quiero recomendar 2 en particular. Es gracioso, porque en uno de los primeros posts del blog recuerdo haber recomendado una peli de Aronofsky, en la que trabajaba Rachel Wiesz (o como se escriba, mil disculpas, lo dije una vez y lo voy a volver a decir, no voy a buscarlo en google para ponerlo «bien» y quedar como que «lo sé» y hacerme el cool. Fuck you -Ahora, uno podría decir que haber escrito todo eso y poner un «Fuck you» es para hacerme el recontra super uber cool… bueno, si piensa eso fuck you twice-). Es gracioso, que voy a recomendar 2 películas, una de Aronofsky, y otra con Rachel Weisz (o whatever). La de Aronofsky probablamente la conozcan, o hayan oído hablar, es Black Swan. La peli está muy muy buena, Natalie Portman está para el oscar y toda la puesta en escena, la música, todo me pareció impecable. No quiero decir mucho porque no quiero cagarle la historia a nadie, simplemente sepan que es muy recomendable.

Pero la otra me interasa más comentarla. Se llama Agora (esta es la de Raquel…). Yo la vi con cero expectativa, no sabía de qué trataba, a dónde iba, nada de nada, y la verdad que me desayuné de muchas cosas. De historia no sé mucho (de hecho no sé nada casi) y aprendí algo y además me movió la curiosidad para ver si aprendía un poco más. La historia ocurre aproximadamente en el 400 y pico DC, en una Alejandría que está gobernada por romanos con creencias en dioses egipcios y donde conviven con judíos y con los «incipientes» cristianos. Por lo que pude leer, más allá de algunos giros y dramatismos la peli es bastante fiel a la historia real, y más que exagerar cosas, de hecho las suavizan un poco (como la escena final) respecto a lo que pasó en realidad. La historia está centrada en una filósofa y matemática -al parecer famosa, reconozco mi ignorancia- llamada Hepatía, aparentemente muy recta, sabia y fiel a sus principios y la historia se entrelaza con algo mucho más grande que tiene que ver con el crecimiento del cristianismo y de los artilugios que usa para sumar adeptos y las consecuencias que eso trae. No quiero contar mucho más tampoco, solo quiero recomendarla con vehemencia. Cuando la terminé de ver me llamó la atención, pensé que seguramente habrían habido reacciones por parte de algún grupo cristiano, porque la película, para mí, no dejaba de pegarles un palo tras otro, pero me sorprendí mucho al ver que el Bati-caca-ano había dado el visto bueno porque en teoría es bastante fiel a los hechos (holly shit). La película te dan ganas de tener una máquina del tiempo y una ametralladora, volver al pasado y reventarlos a todos, es la pura verdad. De nuevo, no quiero contar mucho más, está bueno que la miren. De última se puede discutir algo en los comentarios.

Nada más, saludos.

Los que no creen

Me acuerdo, cuando era chico, en el supermercado (eso dice mucho de la calidad de un libro, creo) vi que vendían un libro que se llamaba «En qué creen los que no creen», o algún título similar. Y ahí me quedé pensando, porque en teoría yo era uno de los que «no creía», y entonces pensé «en qué creo?». Y la respuesta llegó una millonésima parte de segundo después, con un aliviante y contundente «en nada». Y sí, menos mal. Porque una cosa es creer, en el sentido de sospechar, de suponer, poder razonar que si un experimento da tal resultado entonces se puede creer que se debe a tal cosa.

Después está el otro. El «creo en Dios», que es equivalente a «creo en los dragones», «creo que no venimos del mono», «creo que soy hijo de extraterrestres», «creo que el nuevo presidente de los Estados Unidos puede ser bueno». Ese tipo de creencias, que es un «creer porque sí», simplemente creer porque se tiene ganas. Porque obvio que es más lindo creer en Dios y creer que después de morirse uno no se muere si no que va a la vida eterna, que creer que te moriste y chau. Ese cree porque quiere, aunque supongo que en el fondo le debe caber la certeza de que simplemente es un «pensamiento placebo» y se está mintiendo a sí mismo. Ese tipo de creencias son deseos, deseos deformados que se transforman en ansias de que sean cierto, y en la fase final está la creencia con seguridad que son así. Es un proceso complejo de distorsión del pensamiento, que comienza con el simple deseo y termina con la torcedura del sistema lógico con el cual se maneja nuestra mente y termina finalmente en una incoherencia entre tantas. Y hay (habemos, probablemente) muchos de esos, y con muchos pero muchos de esos nudos incoherentes flotando en la cabeza. No pasa solamente con creer en Dios, pasa con creer en cualquier banana, con creer en que ese tipo o tipa que te dejó y te metió los cuernos 30932148 veces, si lográs que vuelva con vos, seguro que va a cambiar, o seguro que lo vas a poder hacer cambiar. No, no es así. Crees eso porque en realidad lo deseás, en alguna parte de tu mente sabés que es cierto, pero el deseo de vivir la ilusión es más fuerte que vivir la realidad. Todos en algún punto estamos montados en una especie de nube de fantasía, que probablemente sirva de motor. Cuánta gente se deprimiría y se suicidaría si tomara auténtica conciencia de su finitud, y que realmente se va a morir y ahí termina todo? Cuánta gente estaría en pareja, planificaría, tendría hijos, si pensara que el amor es pasajero y que  hay altas chances que eventualmente se vaya todo a la mierda? Cuánta gente ahorraría y trabajaría en un trabajo de mierda espantoso con un sueldo de porquería pensando en comprarse la casa propia si realmente asumiera la posibilidad de quedar en bolas con una hipoteca?. En el fondo, supongo que lo saben. No todos, pero me cuesta creer que todos tienen tanta capacidad de autoengaño. La mayoría lo sabe, pero de alguna manera esa es la ilusión de la que se agarran para seguir adelante. «En algo hay que creer», escuché decir muchas veces.

Y a mí me parece que está mal. Creo que todos seríamos mucho más felices si fuéramos plenamente concientes de dónde estamos parados y qué es lo más real, en vez de vivir flotando en la boludez. Si no nos gusta que otro nos mienta -aunque nos demos cuenta que nos estén mintiendo- por qué habríamos de estar cómodos con mentirnos a nosotros mismos? Yo entiendo que hace mil años caía un rayo y podías decir «uy, mierda, eso es una señal que Dios existe», pero en los tiempo que corren, no me jodan. Cree el que quiere. Lo que me perturba es que en algún momento algunos se la terminan creyendo.

A veces me pongo a pensar que la óptica se podría invertir, y en vez de preguntarse «en qué creen los que no creen?» uno, si se autopostula para pararse del otro lado, qué se preguntaría? Si uno sostiene que no tiene lugar para ese tipo de inconsistencias lógicas, podría preguntar mirando a la orilla de enfrente «En qué piensan los que no piensan?». Y ojo, con «los que no piensan» no quiero dejar implícito que los que creen «son boludos». Me refiero a «los que no piensan» como aquellos que en vez de mantener un sistema «lógico» de pensamientos o incluso creencias, pueden convivir consigo mismos sin cuestionarse cosas, o pensando «debe haber otra cosa», «para mí hay algo más», etc etc etc. En algún punto creo que son los más propensos en caer en la categoría «los que creen», pero eso es puro prejuicio de mi parte, lo reconozco. No puedo dar fe que todos los que caen en la categoría «no creen» caen automáticamente en «piensan» y viceversa, pero no me sorprendería si hubiera una tendencia de esas. Pero decirlo así parece duro, parece despectivo, parece adjudicarse cierta capacidad superior. Pero no es así. Simplemente lo expongo para que vean cómo es que está mucho más aceptada la postura número 1). Vender un libro con «en qué creen los que no creen», es como si fuera para tratar de entender a ese «grupete» de gente «que no cree» ———acá mejor aclaro que ni lo toqué el libro, por ahí el libro trata de otra cosa, pero a lo que voy es al metamensaje detrás del tíulo——— y bueno, vamos a ver «cómo es que se las arreglan» para vivir igual, esa «gente sin esperanza» o alguna boludez similar. Eso está bien, esa postura está bien, está aceptada. Por qué? Porque la mayoría está flotando en la fantasía. Simplemente por eso.

Pensá un poquito.

Hola gente. Estaba dando vueltas por internet, cuando me encontré acá con lo siguiente. Por lo visto es una campaña publicitaria, no sé de qué, debe ser de algún programa, alguna radio, no sé, pero me gustó mucho. El slogan «Think for yourself» significa «pensá por vos mismo». Así que acá van las fotos (si hacés click las agrandás).

pensa1.jpgpensa2.jpgpensa3.jpgpensa4.jpgpensa5.jpgpensa6.jpg

Particularmente mis favoritos son la primera y la quinta. Pero son todas excelentes y está muy claro lo que transmiten. Es muy cierto que es increíblemente fácil encontrar gente que parece manejada a control remoto. Quiero creer que no es porque no les guste pensar por sí mismos. Tiene que haber algo más. Pero en el caso del que pinta el graffitti (o como se escriba) o el que tira la molotov, hay veces que realmente parecemos «el hombre masa», y ya la verdad no sé si porque pertenecemos a la manada hacemos esas cosas sin pensarlas, o si hacemos esas cosas pensándolas para pertenecer a la manada.

Yo me cruzo con gente como esta (¿Seré yo también «gente como esta»? porque particularmente no parecen tener conciencia de serlo, por lo cual debe ser muy fácil caer en esa posición ya que uno de los primeros síntomas es no poder ver que uno se comporta «así») todo el tiempo. Incluso uno puede ver el fenómeno de charlar con alguien y obtener una genuina opinión de esa persona sobre un tema, pero si a esa misma persona le hacés la misma pregunta, pero ahora no cara a cara, si no en una reunión, por ejemplo, es increíble como la gente a veces tiende a mimetizarse. (Obviamente, siempre está el payaso desentonante que siempre va a opinar distinto respecto a algo, siempre tiene algo para agregar, etc, pero ese no es más que alguien que necesita ser centro, y es otra historia).

Pero bueno. La moraleja es clara. La próxima vez que vayas a rezar, pensá un poquito y reflexioná sobre exáctamente qué estás haciendo, si tiene algún sentido. Cuestionate todo lo que alguna vez te dijeron y automáticamente aceptaste. Cuestionate todo lo que hacés simplemente porque «los otros lo hacen». No seas pelotudo. No te cuelgues del alambrado, no rompas todo si tu equipo perdió. No quemes cosas, no golpees a otra gente. Antes de sacar a flote esa pulsión de primate, pensá un poco. Antes de ignorar los problemas de la gente que te rodea, pensá un poquito en si acaso tenés aunque sea una mínima responsabilidad de vivir en un entorno donde existe esa clase de desigualdad (¿o la culpa siempre siempre es del «otro»?). Pensá un poquito.

Nota: Este es el post número 50! Entre varios posts medio pedorros, y algunos que considero buenos, llegué a esta marca. Creo que son más de los que esperaba hacer. Y creo que voy a hacer muchos más. Bueno, nada, me pareció digno de comentar.

Serial Killer God

(Nota: lo iba a llamar algo así como «Earth Hand-of-God Massacre», por «Texas Chainsaw Massacre», pero me pareció que no se iba a entender, y no sé si quedaba bien (gramaticalmente hablando, por supuesto))

Me encontré con esto y no pude evitar postearlo. Un flaco que tiene su propio blog se puso a calcular, según la biblia, a cuántas personas había matado «D»ios. Por favor, si saben inglés no se lo pierdan porque está desglosado para poder entender bien cómo se llega a la (astronómica) cifra de más de 2.200.000 personas. Por favor, hacé click acá.

Mejor todavía fue que a alguien se le ocurrió hacer la comparación con cuántos mató «Satanás» (según la biblia). Y resulta que encontró esto (hacé click en la imagen para agrandar):

Dios vs Satán!!!

Chistes obvios, se me ocurren infinitos. Pero no los voy a hacer, porque como ya dije son obvios. Ahora, realmente increíble, no? Estuve leyendo los comentarios en el blog a donde puse el link antes, y había discusiones respecto a que si «Satán» no hubiera obligado a Adán a comer la manzana y no sé qué más entonces nadie habría muerto… en fin… (boludeces). También hay que aclarar que en esta lista no está incluídos los que murieron durante el diluvio universal, etc, que podría llevar esto a cifras mucho mayores!

Pero bueno, ahí lo tienen para todos los creyentes, su Dios lleno de paz y amor!!!

Supongo que esto tendría que ir de anexo en «Ranking Mundial de Muertes Violentas«. Está entre las peores! y lo peor es que tiene impacto -10, porque en vez de horrorizarnos… hizo que lo amen!

Como postre, les dejo esta página que me pareció muy graciosa, y que encontré acá. Y miren, sean testigos de la «furia de dios»!!!!! (click en la imagen para agrandar)

Dios en acción

Popurrit bizarro-teológico

Esto me pasa por estar usando Windows y su hermoso Internet Explorer. Había escrito medio post y se colgó. Qué lindo.

En fin, acá estoy después de tanto tiempo. Está pasando lo que sabía que iba a pasar. Lo comenté en el primer post, que está en mi naturaleza ponerme las pilas con algo y después perder fuerza con el tiempo. Hace rato que estoy pensando «tengo que actualizar el blog» pero me gana la inercia y pienso «no… mejor no…» como si de repente cayera sobre mí esa sensación de que hacer esto es medio denso.

Iba a escribir sobre algo y no sabía en qué orden, pero decidí no hacerlo en ningún orden. Y el tema es que no tiene sentido hacerlo. Me di cuenta que muchas veces escribo posts pensando en un potencial «lector modelo» que no existe. Organizo, planifico y/o escribo obviando cosas o haciendo hincapié en otras con ese lector en mente. Y no tiene sentido, esto no es un libro, donde uno tiene más o menos un target definido ya que la probabilidad de que alguien pague por un tema que no le interesa en absoluto es baja, y por lo tanto sabe que lo que va a leer está dirigido a él. Este blog toca bastantes (aunque no estoy seguro que sean tan diversos) temas, y la mayoría de la gente llega por casualidad, por buscar una palabra o lo que sea, y por ahí llega a un post que le interesa, pero es muy dificil estar en sintonía con todo el resto.

Muchas veces los posts son resultado de charlas que tuve con alguien, y lo que escribo es una especie de respuesta elaborada y rumiada a mi interlocutor previo disfrazada de post. Otras veces es algo que pienso y básicamente me respondo a mi mismo, y esos son probablemente los posts más caóticos, porque realmente se escriben on the fly mientras se me van ocurriendo cosas. Ya dije alguna vez que no siempre estoy de acuerdo con algo que ya escribí. Se podría decir que la mayoría de las veces sí, pero no siempre. Estoy bastante ¿orgulloso? de que tengo/me inculcaron/me formé/me formaron (whatever) un sistema de pensamiento bastante lógico y sólido. Creo que cuando quiero argumentar algo puedo hacerlo bien. A veces pasa que hay varias opciones y por lo tanto se me ocurren argumentaciones sólidas para varias, y en medio de eso es que algunos posts se escriben (y creo se nota).

Algo que me resulta curioso es que cuando en una «discusión» yo argumento (generalmente con mucha vehemencia) en favor de mi postura, siento salir «victorioso» pero los que ven de afuera no parecen pensar lo mismo. Mi vehemencia se interpreta a veces como «ser cerrado». He escuchado más de una vez «es como que estás tan convencido de lo que decís…» y automáticamente digo que esa es la idea, que si no estuviera convencido no argumentaría a favor de eso!. Pero bueno, obviamente hago algo mal.

Pero bueno, cortando el divague. La cuestión es que ese lector modelo que me imagino, no existe. Le hablo a quien no existe, en vezde hablar en general. Aunque hablarle a todos y hablarle a nadie sea exáctamente lo mismo, creo que hay que ampliar un poco el horizonte. Iba a empezar este post de una manera muy distinta, pero lo voy a hacer así (lo hice así, y dos veces! porque acuérdese que se me tildó el Internet Explorer!).

¿Usted cree en Dios? Creo que podría haber varias respuestas a eso, desde el católico (o judío, o musulmán, o lo que sea) ultra ortodoxo hasta ser ateo, pasando por el modo muy conveniente de «agnóstico» y otras yerbas.

Con los muy muy muy creyentes, es dificil interactuar. Están totalmente cerrados a cualquier argumentación lógica porque, claramente, tuvieron que tirarla a la basura la suya propia para poder estar metido en ese sistema de creencias. Particularmente me cago olímpicamente en todo lo que tenga que ver en «cuestiones de fe». No me interesa «creer» porque en algo hay que creer. O porque sea una cuestión de fe (alias: es imposible llegar por el razonamiento pero me gusta creerlo igual y lo creo). Mucha gente usa a «Dios» como la forma más pura de la «plumita de Dumbo». Se acuerda usted de Dumbo? y la pluma que necesitaba para volar, porque si no la tenía no podía?. Pero para mucha gente Dios es más que eso, porque no es solo su amuleto en el cual apoyarse, si no que es todo. Cuando es ferviente creyente, es aquello que le limita lo que puede y no puede, lo que debe y no debe, lo que le genera culpa y alegrías. Cuando uno es un poco más perverso, es aquello que usa como instrumento para dlimitarle a los demás lo que puede y no puede, lo que debe y no debe, lo que le genera culpa… y culpa. A lo largo de la historia, mientras más inmiscuída ha estado la iglesia católica con cuestiones cotidianas, extraordinarias y demás, peor nos fue, más límites cruzamos (sé que debería hacer una distinción entre «Dios» y «La Iglesia», pero no tengo ganas de hacerla ahora, o por ahí sí, más adelante, no sé). Dios es amor, pero su ira te castigará. Dios es amor, pero si te portás mal te manda al infierno. Dios es amor, pero no quiere gente que se ría. Ni que sepa. El saber es poder, y Dios no quiere que nadie más tenga poder. De hecho, ¿Qué es eso de escribir Dios con mayúscula o referirse a Él? Dios es dios, es una cosa tan cosa como una silla. Ni siquiera, una silla es real.

A veces pienso que la mejor forma de hacer un statement sobre la posición de uno respecto a «dios» es simplemente jamás never ever mencionarlo. Creo que es mucho más sano que pelearse con la idea de su existencia. En definitiva, si dios tiene una identidad (es una forma de decir) es la que le damos cuando lo mencionamos. Solo tiene existencia a través de nuestra palabra.

En definitiva, ¿quien creó a quien? convengamos que la vida de dios debió haber sido muy aburrida. Creo que si alguien le debe algo a alguien, en última instancia, es él a nosotros por la bola que le damos. Antes de que existiéramos nosotros con nuestros miedos, irracionalidades, y necesidades de adjudicarle a alguien todas las cosas que no entendíamos, ¿qué era de la vida de dios? Cláramente se creó un mundo que le fue muy ingrato durante muchos miles de millones de años, que, incluso para dios, es mucho tiempo. Nadie pensó en él (no calculemos en la posibilidad de extraterrestres adorando a dios, porque esto ya se podría poner más bizarro de lo que es), nadie le rindio trbuto, se lo imaginó de ninguna forma, ni lo pintó, ni lo mencionó ni le dedicó libros; nadie pensaba en él antes de acostarse o le dedicaba plegarias, nadie le daba el lugar de superhéroe todopoderoso. Menos mal que aparecimos nosotros, se debía estar muriendo de aburrimiento.

La verdad es que, en un estado muy primitivo del conocimiento, se le dio forma a la idea de dios. No sé si en simultáneo en varias civilizaciones, o si tuvo un origen común y después divergieron los distintos matices, la verdad es que no me llamaría la atención si hubiera surgido en varios lugares al mismo tiempo. Como que de alguna manera estamos todos un poquito propensos al pensamiento mágico, fábulas, dioses y demás cuentitos.

Nunca leí mucho la biblia. Algo habré leído, por curiosidad, y me parece un cuento muy gracioso. Podrán decir que es porque me cuesta ubicarme en el espacio y tiempo, que no comprendo para nada las circunstancias, etc, pero me cuesta creer que tanta gente la haya creído a lo largo de la historia al pie de la letra.

He leído en más de un lugar y más de una vez que muchas cosas escritas en la biblia son malas traducciones que han quedado para ser interpretadas infinitas veces. Esto no lo digo yo, no lo descubrí yo, esto que digo de los errores de traducción es algo real. Y como eso mil cosas. Pienso que en algún punto, se deben haber juntado 20, 30, 40, 50, 100 personas? 200 personas? que habrán participado en la escritura en un período no muy largo de tiempo, y después llegó la etapa de la divulgación de los supuestos «hechos». No sé qué sustancias halucinógenas los invocaron a escribir sobre resurrecciones y demás. Si la gente responsable hubiera visto más dibujos animados japoneses, por ahí hoy estaríamos hablando de jesús super saiyajin poniéndose rubio antes de poder efectuar sus milagros (qué loco, no? jesús siempre es rubio y de ojos celestes – coteje eso con la información sobre cómo era la población del lugar), o por ahí ahora leeríamos capítulos en los cuales dispara sus puños atómicos para acabar con los malos.

Igual usaron bastante bien la fantasía, y si usted piensa que no tiene sentido que me «escandalice», debería saber que yo he visto con mis propios ojos una carpeta de un chico de alrededor de 13 años, que asistía a un colegio católico donde le explicaron en la clase de biología cómo era que las «células de Jesús se habían reactivado para permitir su resurrección». O sea. No.

La biblia es un caso aparte que no debería mezclar con el otro tema más grande. Igual quiero dejar clara mis felicitaciones para con el que es claramente el comic de mayor éxito de ventas en la historia. Bah, no es comic porque originalmente no estaba dibujado, pero hoy por hoy, con un par de dibujitos y demás encajaría perfecto. Lástima que se lo toma tan a pecho. ¿se imaginan una religión basada en Superman? Por ahí existe, no sé. Pero imagíneseque cae una bomba atómica, o no una, muchas. Y de la civilización como la conocemos hy queda poco y nada. Los sobrevivientes tendrían que empezar de cero con nadie que les transmitiera el conocimiento, la recrearían en función de lo que encuentras inspeccionando el pasado (nuestro presente). Si encontraran las suficientes referencias a Superman, Batman, El Hombre Araña o quien sea, podrían llegar a creer que lo que allí se relatan son las aventuras de nuestro gran héroe!. Por ahí a usted le parece descabellado, no sé, puede ser.

Con respecto a la otra cuestión, la de who-made-who. Me molesta mucho el argumento «y quien hizo el Big Bang? ahhhhhh no lo podés explicar eso! entonces fue «D»ios». Eh, no. O sea, ya sufrió tantas regresiones dios que deberían entender el destino final del concepto que tanto apadrinan. Antes dios era todo, pero el sol dejó de ser dios, los rayos dejaron de ser dios, los terremotos dejaron de ser dios, el origen del hombre dejó de ser dios, y dios sigue cediendo terreno. Que hoy por hoy haya cosas que no tienen explicación no hablan en favor de dios, hablan en favor de que el conocimiento científico, por suerte no se dedica a rellenar espacios como lo hace la religión; se permite decir un «hoy no tengo explicación» en vez de rellenarlo con cualquier cosa que se les pueda ocurrir.

No tengo muchas ganas, hoy, de indagar en las cuestiones sociológicas que pueden estar involucradas en cómo es que fue progresando la noción original de dios en el derivado cuasi-comercial que hoy tenemos, no solamente porque no es mi área (nunca me impide eso tratar de sacar alguna conclusión, aunque errada a veces) si no porque sería muy largo y además no tendría nada muy  nuevo (creo) para decir. ¿Alguien tiene algo nuevo para decir respecto a estas cosas? Qué se yo.

 A veces me pregunto si uno escribiera mucho mucho mucho sobre lo que piensa. O no si escribiera. Si uno pudiera meterlo en una computadora, si uno pudiera de alguna manera plasmar todo lo que piensa, sobre todo (acompáñenme en esto, no me empiecen a criticar); ¿podría otra persona recrear lo que yo pensaría respecto a algo sobre lo que todavía no pensé? Bueno, eso en realidad es una pregunta un poco ciencia ficción; pero sí creo que en algún pun?o sería interesante que mis hijos/nietos/bisnietos y/o demás leyeran cosas como estas y de alguna manera se queden con una idea de «cómo pienso». No porque piense de manera especial, ni única, ni nada, si no porque es mi manera de hacerlo (sí, por una cuestión puramente ego-ego).

Estaría bueno que algún descendiente lea esto y diga «¿dios? con quien se está peleando este? que es eso?». Estaría bueno.

 Supongo que continuará.

PD: me estoy quedando pobre con los títulos, no?

Rellenando

Tanto tiempo. Cuánto? Una semana? Dos? Algo así. Y bueno, había que trabajar. Sigue habiendo que, pero bueno, heme aquí. Tengo básicamente 3 temas pendientes de los que quiero hablar. Tengo muchos más, pero tengo estos 3 que están relacionados entre sí y no sé exáctamente por donde arrancar, porque de alguna manera cuando hable de uno voy a hablar de los otros 2… o por ahí no. Quiero hablar de dios (sí, con minúscula, y si pudiera ponerlo con una d más chiquita todavía lo haría), del origen de la vida y de la evolución. No necesariamente en ese orden. Tampoco es en orden de importancia.

Hay bastante para decir al respecto y voy a hablar con algo más de autoridad que sobre otras cosas que anduve posteando. Igual, no me voy a cansar de decirlo, falta feedback, y por lo tanto falta el 50% de lo que originalmente tenía pensado que iba a ser este blog, que es la discusión, etc. Me gustaría que alguno aparezca y diga que quiere saber sobre el ADN. O sobre la vida extraterrestre. O sobre la cromodinámica cuántica. Y es obvio que no sé todo, ni siquiera «mucho», ni siquiera «bastante», sobre eso, pero puedo buscar, puedo escribir algo, puede haber interacción, qué se yo.

Por lo pronto, este es como el post pre-post. Sí, pre «post que importa», simplemente para dar señales de vida. O sea que es un post de relleno? Sí, y lo admito, algún problema?