Forwards (o el rugido incesante)

Little fun fact. En 2007, después de un chiquillón de años, Led Zeppelin se juntó para tocar un concierto. Page, Plant, Jones y el hijo de Bonzo aparecieron en el escenario y tocaron un recital que, si bien tiene algún que otro punto bajo (estoy mirando al solo de Stairway), fue memorable por muchas, muuuchas, muuuuuuuuchas razones, como Kashmir, Trampled Under Foot o No Quarter.

Después de ese recital, la gente pensó que vendrían más. Se habló de una gira de 2 años, de un contrato de mil millones de dólares (sí, leyó bien), y no sé cuántas cosas más. Y Page, Jones y Bonzo Jr. estaban de acuerdo. Pero Plant no.

Durante años después de ese concierto los persiguieron por todos lados para saber qué había pasado. Que Zeppelin había ensayado con otros cantantes, que sí querían, que no querían, que Page no podía tocar más, que los ensayos sí, que los ensayos no, etc. Hasta que el año pasado quedó bien pero bien clarito que el motivo por el que no se juntaron fue Plant, que en una declaración dijo, primero refiriéndose a su nueva banda y después a una potencial reunión con Led Zeppelin:

«We’ve been all around the world, setting places on fire and it’s so much better to do that than to bathe in the tepid bathtub of old hits. […]Do you know why the Eagles said they’d reunite when ‘hell freezes over,’ but they did it anyway and keep touring?” he asks. «It’s not because they were paid a fortune. It’s not about the money. It’s because they’re bored. I’m not bored.»

Hay que tener las pelotas recontra bien puestas para eso. La seguridad, el confort de lo conocido. El éxito asegurado. El llamado calentito y complaciente del backwards. Reconfortante como una canción de cuna. Pero no.

En 1969, Plant dice en «Thank You», una de las canciones de amor más lindas de la historia:

If the sun refused to shine, I would still be loving you.
When mountains crumble to the sea, there will still be you and me.

En 2014, 45 años después, en «Pocketful of Golden» del disco «Lullaby and… The Ceaseless Roar», ya desde otro lado, reflexiona:

And if the sun refused to shine
Upon my island home
And darkness fell upon the earth
And once again walk alone

I have pockets full of golden
A little more with every day
Inside my coat a silver lining
Who knows the price I have to pay

No sé a dónde lleva. No sé a dónde apunta. No sé a dónde va. Pero…

Forwards

Deja un comentario